ISCO TIENE QUE HACER OLVIDAR A ÖZIL

Tras la tortuosa marcha de Özil rumbo a la Premier, la salida de Kaká por la puerta de atrás del Madrid y el retraso, cada vez mas eficiente, de la posición de Luka Modric, Isco se ha quedado sólo en la carrera por la mediapunta del conjunto merengue. Un chaval que, pese a su corta edad, tiene suficiente experiencia en Europa y desprende calidad a raudales. Aún así, debe hacer olvidar al Özil de las grandes noches en el Bernabeu.

Mesut Özil es un jugador extraordinario. Para muchos, el mejor 10 del mundo. Un jugador al que le encanta correr. Un exquisito dominio de todas las superficies del pie, sobre todo del izquierdo. Capaz de hacer tres regates en un metro cuadrado y finalizar con asistencia o gol. Con infinidad de variantes, se adapta a todo tipo de fútbol, desde la verticalidad del Madrid de Mou, hasta la apisonadora, con cinco jugadores por delante de la pelota, de la Mannschaft, pasando por el juego sin defensas del Werder. Özil tiene actuaciones maravillosas y, cuando ha estado poco fino, detalles espectaculares. Pero tiene un handicap brutal ya demostrado. Sin presión, el alemán de ascendencia turca es un jugador que todos los entrenadores quieren. Es ese jugador que levanta a los estadios. Pero, en cuanto la presión aparece, ya sea en forma de competencia, partido importante o comentarios de su 'papote', Mustafá Özil, sencillamente desaparece. No es que se deshinche o se esconda, simplemente desaparece.

No obstante, Özil ha dejado actuaciones en Chamartín que para los que las presenciaron permanecen imborrables en la retina y de ahí la rabia incontenible de muchos por que se haya ido. Pero esto no quiere decir que el Madrid vaya a echar más de menos a Özil que el mediapunta al club blanco.

Isco Alarcón aterrizó este verano en Madrid para ocupar, lo que muchos creían, la posición de centrobanquista. Al igual que Sergio Canales en su día, tenía a Özil y a Kaká por delante. A diferencia del cántabro, el joven malagueño adelantó por la derecha a Kaká e hizo replantearse la posibilidad de mover a Özil a la banda izquierda, sacrificando a Di María, para que pudiesen jugar juntos. Mientras no viniese Bale la cosa podía funcionar. Pero Bale iba a aterrizar en Madrid si o sí. Ahí empezó el lío. Si venía Bale el sacrificado no iba a ser el novato, iba a ser Özil. Pero... ¿Por qué?

Isco es un futbolista con un control del balón delicioso. Cada vez que lo busca, lo pincha, hipnotiza la pelota, la acuna y la duerme, como en una relación amorosa. Isco tiene una calidad de la que ni Thiago Alcántara puede presumir. También es un magnifico abrelatas para esos partidos difíciles como el de Turquía. En el Málaga se ganó un nombre y una reputación que, por desgracia, tiene que volver a ganar en el Bernabeu y, personalmente pensamos, que es consciente de esto y por su trabajo está siendo titular.

El arranque de temporada de Isco esta siendo estelar. Con 3 goles en liga y 1 en Champions tiene muy buenas cifras pero también tiene un increíble repertorio de pases y asistencias. Sin embargo, y lógicamente, Isco no es el jugador perfecto. Tiene unas pequeñas carencias. Pero todos tranquilos, son defectos que se pueden pulir con trabajo y esfuerzo. Isco es un jugador muy lento en carrera, y debe darse cuenta que en un equipo donde gusta correr, no debe conducir ni sobar la pelota. Hay momento para todo y que Isco juegue a un toque y lance la contra es fundamental. Luego, que llegue a finalizarla. Pero que la ponga rápido. Habrá partidos para sobarla y buscar pases interiores, en otros, no. Otra cosa, relacionada con jugar a un toque y rápido, es la elevadísima cantidad de faltas que recibe. Los contrarios se dan cuenta de que el malagueño siempre busca darse la vuelta para no jugar de espaldas. Falta y recuperamos sitio, con lo que la contra se esfuma. Aunque, la sustitución de Isco por Bale para poner a Di María de 10, que se produjo en el partido contra el Galatasaray fue por estos motivos, para aprovechar los espacios con velocidad, esperamos que sea una anécdota, porque son las típicas cosas que si van a mas, cortarán la progresión del malagueño. 

Como conclusión, Isco está llamado a ser un grandísimo futbolista si sigue en esta línea, pero a día de hoy, el alemán está un escalón por encima. Un escaloncito por la rapidez y la adaptación a diferentes tipos de fútbol, sin embargo, la llegada de Isco a un grande es lo que necesitaba para evolucionar en lo que algunos piensan que ya es. A día de hoy, Özil mejor que Isco, pero dentro de un tiempo, mas corto que largo, las tornas cambiarán irremediablemente para el alemán, si la cosa sigue así. Si Isco se adapta a la velocidad del Madrid, Özil será un buen recuerdo de los abuelos del coliseo blanco como en su día fue Paul Breitner para los veteranos de hoy. Isco lo tiene todo a favor.